7 DICIEMBRE 2019

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Kabah (México)
Soporte de imagen
-35 MM- ILFORD SFX 200 (400)
Fecha de diario
2019-12-07
Referencia
9720

DIGRESIÓN SIETE. The Night of the Iguana (La noche de la Iguana), EE.UU. (1964). Guion: John Huston, Anthony Veiller (Novela de Tennesse Williams). Director: John Huston. Intérpretes: Richard Burton, Deborah Kerr, Ava Gardner, Sue Lyon, Cyril Delevanti, Grayson Hall. Normalmente solo suelo escribir sobre las experiencias que me gustan (cine, teatro, literatura, arte…); primero por agradecimiento a quien me ha hecho pasar buenos momentos y segundo, porque no voy a perder el tiempo criticando a nada ni a nadie (ya lo he perdido ocupándome de lo que no debía, como para perderlo escribiendo). Esta película era la segunda o tercera vez que la veía (Naty ha impuesto una noche a la semana de cine clásico), sin embargo, nos ha defraudado un poco a los dos.  Tenía mejor recuerdo de ella pero, dado que tengo una fotografía de una iguana mexicana (bellísimos animales), la película era de John Huston (uno de mis directores preferidos de hace años y de siempre), y que está interpretada por Richard Burton, Ava Gardner y Deborah Kerr, pues nada, que aquí estoy, frente a la pantalla y el teclado para ver si me sale algo que merezca la pena leer cuando aparezca editado en este diario (luego me olvidaré y no volveré sobre ello nunca más, tampoco sobre la película). Huston, en los años ochenta, me encantaba y después también. Hizo películas tan memorables como El halcón Maltés, El tesoro de Sierra Madre, Vidas rebeldes, La jungla de asfalto, La reina de África, Paseo por el amor y la muerte, Fat City y más, bastantes más, todas ellas hondas, épicas, soberbias; como despedida, la perturbadora Dublineses (Los muertos). Ésta, es estimable a pesar de que los perfiles de los personajes resulten decepcionantes e incluso las interpretaciones (tuve la impresión de que estaban todos fuera de registro). Mereció la pena volverla a ver por lo exótico de la localización, por las bellísimas iguanas, y porque, al fin y al cabo, todos los que intervienen en ella fueron muy grandes, mucho. No me arrepiento, es más, me alegro de haber empleado dos horas viéndola. Un gusto, aunque la historia de Huston tendría que haber ofrecido una textura dramática más rabiosa, más potente, más desesperada. Margen en la novela de Tennesse Williams había.

Pepe Fuentes ·