4 FEBRERO 2020

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Toledo (España)
Soporte de imagen
-35 MM- ILFORD SFX. 200 (800)
Fecha de diario
2020-02-04
Referencia
9800

EL HIJO DEL FERROVIARIO, o cómo todo termina colocándose en su sitio IV

Continuando cuesta abajo, en la siguiente puerta, vivía el practicante del barrio, muy apreciado (ahora tiene una especie de monumento en un parque). En aquellos años, era el segundo en popularidad, después del cura, también muy significado (Don Luis, creo que se llamaba), aunque el practicante tiene una estatua homenaje y el cura no. Pasaba consulta en su casa todas las tardes; yo no iba porque a mí, las inyecciones, me las ponían o mi padre o mi madre, que eran muy buenos en eso (pinchaban a toda la familia). Justo enfrente del practicante vivía el que fue mi mejor amigo en aquellos años; un poco más adelante esa amistad tan intensa acabó porque descubrimos que éramos incompatibles: a él solo le gustaba cazar y pescar y a mí solo buscar chicas con las que ligar e incluso enamorarme (era enamoradizo). Primero fueron las niñas, luego las chicas, después las jóvenes y más adelante las mujeres. Esa pasión de toda la vida se ha extinguido porque ya soy viejo. Más abajo, siempre en el lado derecho, había dos segundos pisos (en esa puerta no había bajos o primeros), y en uno de ellos vivía una niña un año o dos más pequeña que yo, de la que me enamoré perdidamente (yo tenía once años, o tal vez doce ya)…

Pepe Fuentes ·