7 SEPTIEMBRE 2020

© pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Fecha de diario
2020-09-07
Referencia
9626

DIGRESIÓN SIETE. Berlin Alexanderplatz. Alemania (1980). Película en trece capítulos y un epílogo. Capítulo siete: Recuerda: una promesa puede ser rota. Guion y dirección: Rainer Werner Fassbinder (a partir de la novela de Alfred Döblin). Música: Peer Raben. Fotografía: Xaver Schwarzenberger. Intérpretes: Günter Lamprecht, Karlheinz Braun, Hanna Schygulla, Claus Holm, Franz Buchrieser, Brigitte Mira, Roger Fritz, Günter Kaufmann, Gottfried John, Barbara Sukowa, Ivan Desny.
“…En el fondo, la novela pone de manifiesto la cara poliédrica de la vida y de los seres humanos, y lo hace empleando a su vez un estilo también poliédrico, por lo que, a mi entender, si por algo cautiva esta novela es por la concordancia precisa que existe entre su fondo y su forma, algo que sólo ocurre en contadas ocasiones que suelen corresponder con obras memorables…”. Fernando Alonso (Billar de Letras).
Franz ha sobrevivido, pero ha perdido el brazo derecho en la malhadada incursión en el mundo del hampa. Vive en casa de Eva y su amante, Herbert, donde se recupera de la amputación. Una noche, Franz va al barrio rojo, no se sabe con qué fin. La puesta en escena de una calle repleta de prostíbulos y mujeres con indumentaria procaz, asomándose por puertas y ventanas en un ambiente onírico es, sencillamente, impresionante y magnífica. Un chulo, elegantemente vestido, le ofrece a una mujer a la que él llama la meretriz de Babilonia. Franz no accede a ninguna de sus misteriosas y oscuras propuestas. De ahí va a un bar donde dialoga, en una especie de conversación imposible, con tres cervezas y un aguardiente. Franz parece estar muy entonado y alegre. Una mujer, que le observa golosa e impaciente por conseguirle, se va con él a continuar la noche de diversión. En el periplo noctámbulo, se encuentra con Metz con el que habla del atraco y la pérdida de su brazo. Continúa con la mujer extraña, que parece una trastornada. En un cabaret conoce a un tipo que, probablemente, volverá a aparecer en su vida…

Pepe Fuentes ·