31 DICIEMBRE 2021

© 2021 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2021
Localizacion
Toledo (España)
Soporte de imagen
DIGITAL (100)
Fecha de diario
2021-12-31
Referencia
4043

EL DÍA DE LOS EPÍLOGOS
Empecé con dos entradas de La Colección de Misceláneas (5) sobre el perdón, que en ese momento me mantenía en vilo. En el resto he escrito de política, de Jesucristo y el cristianismo, con un análisis y opinión (personal, como no puede ser de otro modo) sobre la existencia de Dios. Me salió que No (que más que improbable es imposible).
De ahí pasé a narrar algunos avatares de mi vida sentimental, en el Diario Íntimo (4), con una crónica de reconciliación y todo.
Las Digresiones (8), cinematográficas en este caso. Han predominado las películas rusas.
Este mes ha habido bastante variedad en cuanto diarios temáticos, porque, además de los ya mencionados, han acudido el de La Gana y la Desgana (3) dos dedicados a la Desgana y tan solo uno a la Gana, pero que casi valía por dos.
El de las Otras Cosas (5) dedicado a la filosofía y sus implicaciones con el mundo de la peluquería, encarnada en mi peluquero (filósofo, o más bien teólogo aficionado). El Mapa de los Días (5) ha tenido el mismo protagonismo que cada mes. A pesar de que este debería ser el capítulo más presente e importante porque, a fin de cuentas, la vida no es mucho más que una incesante y finita procesión de días, no lo ha sido del todo. Es más, con el quinto de este mes despido este apartado que ha contado con cien entradas. Quizá tenga continuidad (si el diario continúa) pero de otro modo.
De cualquier modo, este mes, me ha costado un grandísimo esfuerzo sacar el diario adelante, lo que me remite al dilema de seguir o no. Mi conclusión es que todavía no lo Sé; quizá sea pronto para tomar una decisión tan importante para mí, y tan poco importante para el resto del mundo.
La Fotografía: Dado las reflexiones sobre Dios y su hijo que han animado el diario de este mes, pues nada, me he decidido a fotografiarlo para refutarme a mí mismo, y aquí está el resultado: Dios mismo, ya sin nada que hacer, en mi plató.

Pepe Fuentes ·