7 SEPTIEMBRE 2022

© 2022 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2022
Localizacion
Almonacid (Toledo)
Soporte de imagen
-DIGITAL 800
Fecha de diario
2022-09-07
Referencia
4242

DIARIO DE REVELADO

TREINTA Y NUEVE, del diecisiete de Agosto de dos mil veintidós
Fotográficamente me siento sumido en una grave crisis, ahora realizo fotografías con suma facilidad, sin esforzarme apenas, como quien no quiere la cosa. Y lo más curioso y decepcionante al mismo tiempo, si miro hacia atrás e intento nivelar esfuerzos y valores; concluyo que me sentía más fotógrafo antes que ahora (de cualquier modo, nunca he sentido ser nada en especial).
La razón de mi mayor conexión con el lenguaje antes es que me esforzaba más. Todo me parecía más trascendente (aunque, me temo, que tan solo era una simple percepción bastante subjetiva). La tecnología ha desarrollado sistemas, tanto cámaras como programas de revelado que cubren un espacio que antes, cuando tan solo manejaba los soportes analógicos, eran insalvables para mí, por complejo. Ahora es todo infinitamente más sencillo.
Qué ha conllevado esa nueva circunstancia, al menos en mi caso, que ahora fotografiar es como coser y cantar y antes era  gastar, sufrir y sudar (también disfrutar, a veces) … En consecuencia, mi relación con la fotografía ahora es sensiblemente más superficial y despreocupada. No creo que la facilidad ayude en nada a la interiorización en lo que se hace.
La Fotografía: Veamos, esta imagen, tan aparentemente engañosa y complicada en cuanto a equilibrar tonos y contrastes, hubiera sido infinitamente más laboriosa y larga, luego la interrelación con el tema más profunda. Hace tan solo tres años, habría colocado mi vieja Mamiya RB67 en el trípode con una película lenta o de elevada definición (Pan F 50), el rollo de 120 mm lo habría revelado con D-76, un mes o mes y medio después (esperaba a tener varios para concentrar las sesiones de revelado, siempre tan esforzadas). Esperaría dos o tres meses más para reunir suficiente material para concentrar una sesión de positivado y ahorrar energía y costes. Tiempo desde la toma hasta tener la copia entre mis manos, parecida a esta, tres o cuatro meses. Coste de producción: en torno a 100 €., y varias horas de trabajo.
La foto de hoy la hice con mi cámara Fuji GFX100 (200 MG, por imagen), en unos minutos, pocos. Descargué la imagen en el ordenador. Utilicé el programa de revelado CaptureOne y la terminé en treinta minutos o menos (en menos de una hora generé esta imagen, y todo en el mismo día), bien es verdad que no tengo copia en papel; pero podría realizarla añadiendo unos pocos euros y una hora más de trabajo, como máximo.
Ahora se puede fotografiar bailando y cantando, como si nada. A partir de esa premisa, todo el tiempo, energías y recursos que ya no es preciso invertir, se puede emplear en elevar la calidad, intensidad y proyección de los contenidos. En esta época pixelada, la proyección como artista del artífice digital radica, sobre todo, en la elección de los temas, la aplicación de estilos y ajustes de revelado y, esencialmente, en la proyección filosófica de sus elecciones. Nada más y nada menos.

Pepe Fuentes ·