Los retratos enfáticos…
…y que provocará que afloren SENSACIONES que deberá escuchar y expresar para que su todo adquiera algún sentido…
VOCES de Antonio Porchia:
* Despertar es siempre una sorpresa.
* Las veces que río, si me veo reír, dejo de reír.
* Mi vida parece ser el comienzo de una comedia, ahora, ahora que es el fin de una comedia.
* Dilo muy bajito lo que sientes, si no es una pena lo que sientes.
* Cuando busco mi existencia, no la busco en mí.
* Siento que me repito cuando repito al otro, no cuando me repito a mí.
* Perece que los niños deben sentir mucho la tristeza, porque la alegría, ¡la sienten tanto!
* Todo lo que he dejado de sentir, no lo siento menos.
* Cuando ya no sentimos el fruto de nuestras fatigas, sentimos nuestras fatigas.
* Acabo de sacrificar un pequeño insecto y miro la sangre. ¡Dios mío, qué infinito mar de sangre!
OLGA Y ALESSANDRO. Este individuo, que no era amigo mío, italiano y dedicado al comercio de ropa de moda, era la pareja estable de la chica que me gustaba, la de ayer. Como maniobra de aproximación para poder urdir y desplegar estrategias fatales hacia la chica, les propuse fotografiarlos en plan «artista» y así hacerme notar. Lo cierto es que este retrato no quedó mal y no fue precisamente por mi aprecio hacia el modelo