"El Devenir: una agonía sin desenlace". Emile Cioran
DESCONEXIONES (de una Supuesta Realidad).
Ah, ah, ah, ah, aaah, ay
La verdad a mí me engañó
Y la verdad a mí me engañó
Yo me fie de la verdad
me fie de la verdad
me fie de la verdad
y la verdad me engañó
la verdad a mí me engañó,
cuando la verdad me engaña
de quién me voy a fiar yo…
Bernardo el de «Los Lobitos»
NADA QUE ESCRIBIR XIII… Con el cielo a cuestas, (2015). Gonzalo Suarez. Novela. «Como los sueños modifican lo soñado conforme lo soñamos, nuestra percepción cambia el decorado conforme nos movemos en el escenario. O ante la página en blanco. Entre lo que no sé y lo que olvido se abre un resquicio al vacío que se llama instante. Ése es el no lugar donde todo pasa sin antes ni después». Gonzalo Suarez
Dedicado a mí mismo:
Soy anacrónico
todos los somos.
Es la funesta ley del tiempo.
Me constituyen, esencialmente,
las partículas olvidadizas de lo vivido:
inciertas y temblorosas;
inaprensibles y efímeras.
Hoy, ahora, me descompongo en la bruma
de la cadenciosa y repetitiva inmediatez,
luego solo soy inconsciente fugacidad.
Mañana moriré y todo habrá acabado sin terminar,
pavorosa e inauditamente fugaz
…Entonces, el mundo seguiría girando y girando hasta el final de los tiempos sin que mis fotografías se hicieran visibles. Pero que me pasaría a mí. Es que no lo sé. Creo que por ahora voy a dejar el interminable asunto de mis dudas hasta que lo tenga más claro. Eso sí, si finalmente decido salir a «vender» lo mío, lo iré contando aquí, procuraré transcribir literalmente los diálogos que mantenga con las autoridades artísticas que seguro que resultarán desternillantes. Aunque sólo sea por eso, por añadir un poco de «ingenua y bienintencionada marchita» a la aplastante cotidianidad, merecería la pena intentarlo…
…SOBRE EL CONFORMISMO Y EL PLACER EN LA MUY MADURA EDAD IV: Estoy consiguiendo uno de mis más tontos objetivos: no morirme pronto. Bueno, ya está conseguido, porque si me voy ahora, si desaparezco al fondo a la izquierda, habré durado bastante. Bastante más que mi padre, por ejemplo, que siempre buscó el placer súbito y fatal y lo consiguió enganchándose a fáciles pero desesperadas y destructivas adicciones. Quizá concluyó que la «vida sana» como la mía, era insoportablemente aburrida. Luego mi padre quizá fuera más lúcido de lo que aparentaba, pero eso no lo sé porque nunca me lo dijo. El modo de cuantificar el logro de no morirme pronto es cumplir años y hoy, precisamente hoy, cumplo uno más, y de este modo me acerco más y más a un cierto éxito que no es otro que permanecer en el mundo muchísimo tiempo, sin más matices. Estoy aquí desde hace -22.646 días-, salvo error de cálculo. Sobre la obra de Nick Cave dos tipos hicieron, contando con la presencia del artista (músico, poeta y alguna cosa más), un documental, al parecer fascinante (que no he visto) con el título de –20.000 días en la tierra- (los de vida del susodicho creador, supongo). Por mi parte no hay documental que valga pero, aunque me vaya ya, al menos he conseguido un irrefutable epitafio: «No hizo nada en la vida, pero se quedó mucho tiempo»…