UNA VEZ AL AÑO VOY A CUENCA MUY TEMPRANO: desde hace algunos años mantengo una costumbre (que pienso abandonar): visitar esta ciudad en la madrugada del viernes de la Semana Santa Católica. Naturalmente para fotografiar, porque me interesan mucho los gestos y actitudes que adoptan las personas inmersas en el espíritu de la causa o manía que les reúne. No así la manía en sí misma, que procuro obviar o eludir por anecdótica y sabida. Esta es mi primera fotografía de mi primer viaje a Cuenca (que hice por motivos muy distintos). Me gusta mucho Cuenca (debe ser porque sólo voy una o dos veces al año) y siempre miro con mucha curiosidad y gusto a la ciudad y sus habitantes.
23 SEPTIEMBRE 2006
© 1979 pepe fuentes