1 AGOSTO 2020

© 2020 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2020
Localizacion
SERIE TV: EXIT, de Oystein Karlsen.
Soporte de imagen
-DIGITAL 12.800
Fecha de diario
2020-08-01
Referencia
7605

DIGRESIÓN UNA (1). Exit (TV Series: 8 episodios de 30 m.) Noruega (2019). Guion y dirección: Oystein Karlsen.
Intérpretes: Simon J. Berger, Agnes Kittelsen, Päl Sverre, Tobias Santelmen, Jon Oigarden, Ine Marie, Catharina Vu, Gjertrud L. Jynge, Tim Scott, McConell, Ellen Helinder, Eivin Nilsen.
Apocalípticos. Los cuatro protagonistas son los cuatro jinetes de la Apocalipsis, eso sí, en vez de caballos usan Porsches o Ferraris (también BMW de alta gama). Antes de cumplir treinta años eran multimillonarios (en el tiempo real de la historia, tres están en la treintena y uno en la cuarentena) y, además de una brillantísima inteligencia, al menos financiera, exhiben un hedonismo cínico, nihilista y desesperado: siempre llegar más y más lejos, tener más dinero, más orgasmos, más pérdidas de control (drogas, alcohol). Hijos de puta sin paliativos pero, eso sí, encantadores entre los de su clase y condición. Al resto del mundo ni lo ven, incluidas las mujeres (especialmente las suyas). Ni por lo más remoto llegan a cuestionar que vivencialmente dependen de la prostitución: las putas son parte del atrezo, ni siquiera existen como personas, tan solo son instrumentos. En el colmo de la retorcida e inescrupulosa ausencia de valores que se puedan asociar a lealtad y consideración hacia los demás, uno de ellos es capaz de mentir a su mujer durante cinco años, simulando que la acompaña en el intento de quedar embarazada, cuando la realidad es que hace años que se hizo la vasectomía. Sus colegas lo saben y es motivo de bromas entre ellos. Los cientos de millones que cada uno tiene parece que se regeneran y multiplican solos, sin que tengan que hacer esfuerzo alguno para ello. Solo se ocupan en planificar y llevar a cabo fiestas y orgias a todas horas. Son la prolongación de sus sempiternas rayas blancas (euforizantes, nunca siniestras como la heroína). Los cuatro llegan a límites moralmente execrables, pero eso sí, parece que se guardan una cierta lealtad que les sirve para autoprotegerse. El resto de la gente que asiste a sus puestas en escena dan igual, no existen más allá de meros extras para poder representar sus orgiásticos éxtasis, para que el escenario siga brillando y ellos puedan ocuparse de lo que les interesa por encima de todo: ellos mismos…

Pepe Fuentes ·