19 OCTUBRE 2023

© 2023 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2023
Localizacion
Villanueva de los Infantes (España)
Soporte de imagen
-DIGITAL 25.600
Fecha de diario
2023-10-19
Referencia
10128

LOS MICROVIAJES: a Villanueva de los Infantes (5)
Jueves, cinco de octubre de 2023

… Después me dirigí a la Alhóndiga, antigua cárcel (s XVIII) y ahora bella y cuidada Casa de Cultura. Cuenta con un patio interior de dimensiones proporcionadas y gruesas columnas con inscripciones de los presos. Interesante edificio.
De ahí, por la calle Cervantes (era la vía principal de la ciudad, desde la que se articulaba el resto del casco antiguo, junto con la Plaza Mayor; hacia el convento de Santo Domingo.
Mi casi amiga desde primera hora de la mañana, me dio indicaciones sobre la visita a las dependencias dónde pasó sus últimos meses de vida Francisco de Quevedo, así como otras partes del Convento: refectorio y claustro porticado de ladrillo mudéjar, espléndidos ambos.
En cuanto las dependencias dónde vivió el poeta y escritor, gravemente enfermo: de marzo al 8 de septiembre de 1645, fecha de su muerte, eran dos pequeñas habitaciones: una dónde se encontraba la mesa de trabajo, al parecer auténtica; y el dormitorio, con una pequeña cama, reproducción de la que usó. Había algunas urnas y armarios donde se exponían primeras ediciones y manuscritos, además de imágenes y pinturas del escritor y político.
Sus últimos meses en el Convento fueron penosísimos por el progresivo deterioro y las muchas sangrías a que le sometieron.
Él sabía que moriría pronto, hizo testamento y ordenó sus cosas, imagino que tristemente.
En una de las paredes está expuesto el último y conmovedor soneto escrito, el de despedida:

Ya formidable y espantoso suena
dentro del corazón el postrer día;
y la última hora, negra y fría,
se acerca, de temor y sombras llena.

Si agradable descanso, paz serena
la muerte en traje de dolor envía,
señas da su desdén de cortesía:
más tiene de caricia que de pena.

¿Qué pretende el temor desacordado
de la que a rescatar piadosa viene
espíritu en miserias anudado?

Llegue rogada, pues mi bien previene;
hálleme agradecido, no asustado;
mi vida acabe, y mi vivir ordene.
Francisco de Quevedo

La Fotografía: Mesa de trabajo de Quevedo, en su celda del Convento de Santo Domingo.

Pepe Fuentes ·