27 OCTUBRE 2023

© 2023 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2023
Localizacion
Madrid (España)
Soporte de imagen
DIGITAL 2000
Fecha de diario
2023-10-27
Referencia
10139

LOS MICROVIAJES: acercamiento a Pablo Picasso (4)
Sábado, quince de octubre de 2023

… Mi siguiente parada estaba prevista para las ocho de la tarde y eran las seis y media. Decidí dar un paseo por Madrid, al mismo ritmo que había visto las dos últimas exposiciones. Bajé por el Paseo del Prado y al llegar a la plaza de Cánovas del Castillo (Neptuno) giré a la derecha y por la Carrera de San Jerónimo me dirigí hacia la Puerta del Sol. Mucha gente por doquier, la temperatura era agradable y todo el mundo estaba en la calle, hasta yo estaba, que soy el hombre de las cavernas. De vez en cuando fotografiaba a la gente (casi ninguna de esas tomas sirve para algo). Ni siquiera metafóricamente, sencillamente porque, por mucho que me empeñe la gente es gente y ya está. Lo mejor de mi paseo es lo tranquilo que me sentía y con la aséptica distancia que observaba lo que me rodeaba. Iba flotando, en trance casi (todo me importaba una mierda, salvo mi bienestar).
Casi sin querer, desde la Puerta del Sol, giré por la calle Carretas, luego la de Jacinto Benavente y continué por la del Ángel hasta la de Santa Ana, dónde paré (me gusta mucho esa plaza) a echar un vistazo a la programación del Teatro Español, de la que solo me interesó una adaptación de El corazón del daño, de María Negroni, pero no tenía entrada y además tenía otros planes para la misma hora.
Sí, otros planes que tenían que ver con la misión de esa tarde: acercarme a la vida y obra de Pablo Picasso.
Bajé por la calle Huertas hacia la Glorieta de Atocha, y en esa calle, a las siete y cuarto de la tarde, más o menos, observé que había numerosos bares abiertos y llenos (bueno, eso es sabido), e incluso sitios dónde se bailaba y tardeaba con intención; es decir, eran sitios para ligar, me pareció; y aunque me guste mucho esa actividad humana, yo tenía otros planes.
Llegué a la plaza donde se encuentra el Museo Reina Sofía, con mucha gente (Madrid era una muchedumbre en marcha, por todas partes) y comprobé que había una cola de doscientos metros, como mínimo, y de trescientas personas, también como mínimo, que esperaban entrar gratis al Museo (los sábados lo es de siete a nueve de la tarde). No me puse en la cola, a pesar de que había una exposición temporal sobre Picasso, porque yo tenía otros planes y porque de colas en mi vida, ni una, si puedo evitarlo…
La Fotografía: Una gran riada de gente bajaba por la calle Montera hacia Sol, porque sí, porque estaban allí en ese momento. No, no era una manifestación, era tan solo que el mundo en general y Madrid en particular está superpoblada y eso, casi siempre, me parece una insoportable molestia. Pero, no obstante, en ese momento no me afectaba especialmente, en ese momento, todo me importaba una mierda (creo que eso ya lo he dicho), de hecho di media vuelta y me largué en dirección contraria, hacia la Plaza de Santa Ana.

Pepe Fuentes ·