25 MARZO 2024

© 2024 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2024
Localizacion
Hospital Tavera, Toledo (España)
Soporte de imagen
-DIGITAL 640
Fecha de diario
2024-03-25
Referencia
10279

LOS DÍAS 24.1
“El artista puede expresarlo todo. Pensamiento y lenguaje son para el artista instrumentos de un arte”. Oscar Wilde
Viernes, quince de marzo de dos mil veinticuatro

Salí temprano a dar mi paseo, como siempre. Circunvalé la ciudad, por el recorrido habitual, con el río de por medio y una panorámica del caserío a la altura del horizonte. Llevaba la cámara conmigo.
Después de la caminata, tenía un plan: visitar el Hospital Tavera, también conocido antiguamente como de -afuera- (extramuros). Es un edificio renacentista austero, como todos los de este estilo que se construyeron en Castilla. Lo mejor de nuestra naturaleza, la de los castellanos, la austeridad, aunque no sé si podríamos catalogar como virtuoso ese rasgo o tan solo propio de una cierta sequedad y estrechez de espíritu. También grandeza, y todo al mismo tiempo. Para mí, en la medida que pueda serlo, que lo soy, mejor así para que nada se nos note demasiado. Sobrios siempre. De cualquier modo, no me siento cualificado para hacer un análisis caracterológico de nuestro modo de ser castellano en general y toledano en particular.
Soy un descreído de la cultura popular y sus síntomas y expresiones sociológicas de la mayoría, marcadas por el tiempo, tradiciones y costumbres, hacia las que siento toda la reticencia que me cabe. Sí, lo de la idiosincrasia colectiva o el contagio entre vecinos, eso de todos juntos en lo mismo y a un tiempo. No, no soy sospechoso de patriota y profundamente enemigo de los trasnochados y ciegos nacionalismos, de los que siempre acaban mal por  fanáticos y paranoides.
Mi sentido de la individualidad es innegociable. Sin ella la vida interesante no existe.
No obstante, soy profundamente respetuoso con las tradiciones culturales, pero eso sí, que las encarnen los demás porque a mí eso no me sale. Esas gentes, los gregarios y convencidos, son útiles en la medida que son depositarios de la sustancia que amalgama y vertebra las sociedades en las que conviene vivir, por lo de la confortabilidad y los servicios, pero no necesariamente participar. ¿Cinismo interesado por mi parte? Tal vez, pero es que en el ejercicio del vivir no me sale otra cosa.
¡Otra vez me he dispersado con las dichosas digresiones!
A las once menos cuarto llegué frente a la puerta del magnificente Hospital -de afuera-; me gusta mucho esa denominación histórica y la palabra, que ya nadie utiliza, por ser fuertemente resonante para mí…
La Fotografía: Primero pagué (10 €) sin descuentos por edad provecta, a los que me he aficionado, porque el monumento es particular (Casa de Medinaceli). Esperé el momento de hacer la visita guiada programada (11:15), fotografiando el magnífico doble patio renacentista. No recuerdo haber visto ninguno parecido tan bello como este.

 

Pepe Fuentes ·