...hice esta toma en la que aparece la cúpula del observatorio astronómico…

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Chichen Itza (México)
Soporte de imagen
-35 MM- ILFORD SFX. 200 (800)
Fecha de diario
2020-05-27
Referencia
9616

VIAJE A MÉXICO, Julio 2019
Chichen-Itzá y Cancún:
sábado veintisiete, por la mañana y por la tarde

El centro neurálgico de la ciudad era la gran pirámide, El templo de Kukulkán, en honor del Dios del mismo nombre (estructura también conocida como El Castillo).
Fotografié la magnífica construcción desde todos los lados, los cuatro que marcan los puntos cardinales, todos iluminados ya que el sol de mediodía se encontraba perpendicular al centro.
La visita duró en torno a dos horas y cuarto. De dos a tres comimos en un restaurante autoservicio con un inmenso margen de mejora.
Después, el autobús que nos había traído nos dejó en un hotel (desde el que hice esta toma en la que aparece la cúpula del observatorio astronómico). Ahí tomamos otro que nos llevaría hasta Cancún, última etapa del viaje.
Salimos de Chichen-Itzá a las cuatro de la tarde y llegamos a Cancún a las siete y media.
Desplazamiento largo, fatigoso, sobre todo por la monotonía del paisaje: plano, largo, recto, interminable, sin apenas matices.
Dejamos las maletas en el hotel, nos duchamos y salimos a cenar. Lo hicimos en un restaurante italiano, donde también nos tomamos un cóctel de despedida.
Nos acostamos a las once y media. A estas alturas nos sentíamos terriblemente cansados y, sobre todo, aunque satisfechos con el viaje, se nos habían acabado los alicientes. Somos turistas de viajes entre quince y veinte días, no más…

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Homun, México
Soporte de imagen
-35 MM- ILFORD SFX. 200 (800)
Fecha de diario
2020-05-25
Referencia
9635

VIAJE A MÉXICO, Julio 2019
Homún II:
viernes veintiséis, a mediodía.

Fotografié un poquito en los agujeros a velocidad de obturación demasiado lenta. Apenas tenía luz.
El tercer cenote estaba abierto por arriba y se parecía a una piscina, salvo por las raíces del álamo que bajaban descarnadas hasta tocar el agua.
Volvimos al centro de recepción en el mismo carrito plataforma sobre vías estrechas tirado por un caballo con las Smith y una pareja más.
Llegamos al punto de partida después de un recorrido de dos kilómetros o algo menos. Allí nos esperaba Braulio con el menú que habíamos elegido. Comimos bien.
Durante la comida, la Smith grande se mostró comunicativa y charlamos sobre sus orígenes emeritenses y su vida actual en Miami, donde es enfermera.
Nos dijo que tenía intención de volver a Mérida una vez jubilada. La pequeña pero voluminosa Smith permaneció muda, acompañada de su móvil al que miraba intensamente como si algo esencial de su vida se estuviera decidiendo en la dichosa pantalla. A nosotros, creo recordar, que ni nos miró en toda la mañana.
Volvimos a Mérida. Braulio siguió charlando incesantemente pero ya no nos hacía tanta gracia. Se puso pesado. Inevitablemente ocurre con todas las gentes que padecen incontinencia verbal. Terminan cansando antes o después. Con ellos, el aburrimiento está asegurado. Nos dejó en el Hotel.
Descansamos un rato y nos dispusimos a pasar la tarde callejeando por la ciudad.
Visitamos la catedral.
A pesar de que nos empeñamos mucho en buscar algún rincón o motivo que nos reconciliara con la ciudad, fotográficamente al menos, no conseguimos encontrar la gracia que seguro debía de tener.
Uno de los problemas era, me pareció, que muchas de las calles habían perdido la esencia arquitectónica tradicional con una mezcolanza chirriante entre algunos edificios coloniales y otros de una arquitectura actual sin carácter. La impresión predominante era de una fea ambigüedad.
No obstante, tal vez, la culpa fue nuestra porque no recorrimos el Paseo de Montejo, el más importante de la ciudad, donde se conservan edificios y palacios coloniales de gran valor.
No fotografié en Mérida.
Cenamos en un restaurante típico y antiguo, llamado la Chaya Maya, decimonónico parecía, de altos techos y un sospechoso olor a viejo. Pero, lo peor no fue la decoración, sino la comida y el servicio, notoriamente mejorables ambos. Acudían turistas, muchos, luego nosotros también fuimos…

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Homun, México
Soporte de imagen
-35 MM- ILFORD SFX. 200 (800)
Referencia
9634
© 2020 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2020
Localizacion
Cañón del Sumidero (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400 (1600)
Referencia
9676
© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Río Usamascinta (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400 (1600)
Fecha de diario
2019-10-18
Referencia
9717

DIGRESIÓN SIETE: El abrazo de la serpiente, Colombia (2015). Guion: Jacques Toulemonde y Ciro Guerra. Dirección: Ciro Guerra. Fotografía: David Gallego (B&W). Intérpretes: Nilbio Torres, Antonio Bolívar, Jan Bijvoet, Brionne Davis, Yauenjü Migue, Luis Sciamanna, Nicolás Cancino. Estéticamente sublime, en un blanco y negro vibrante, pleno de matices y contrastes. La cámara se acerca a las texturas y los claroscuros de la selva amazónica con el irrenunciable propósito de mostrar su insondable misterio y sus aterradores efectos sobre la naturaleza humana. La selva sobrecoge. Los seres humanos no podemos asumirla en toda su inabarcable esencia, nos perturba, nos enloquece. Los extraños seres humanos que la habitan pertenecen a una dimensión inasumible para el resto. La película narra los dos viajes que realizaron dos etnobotánicos en dos épocas diferentes y cuyo objetivo era encontrar la yakruna, una poderosa planta existente en el corazón de la selva; los acompaña Karamakate, un chamán del Amazonas que lleva años en total soledad y que se ha convertido en «chullachaqui«, una cáscara vacía de hombre, privado de emociones y recuerdos. Son viajes iniciáticos donde también aparece el efecto devastador de la colonización occidental, con personajes perdidos en la selva como el predicador que, en su alucinación, se convierte en un mesías redivivo, trasunto del Kurtz de Conrad; o como los “colombianos”, que masacran a los indígenas. La historia se mueve en dos planos temporales, la del primer y segundo viaje (1909 y 1940), y ambos con el chamán Karamakate como nexo en el tiempo (perfecta elección de los dos intérpretes, con un asombroso parecido con treinta años de por medio). Es de agradecer que la película termine mostrándonos los increíbles Cerros de Mavicure, de una belleza y misterio sorprendente, fascinante.

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Puebla de Zaragoza (México)
Soporte de imagen
-120 MM.-PAN F 50
Fecha de diario
2020-02-29
Referencia
9170

VIAJE A MÉXICO, Julio 2019
Puebla de Zaragoza (Puebla)
:
lunes quince, por la tarde

Súbita e inesperadamente comenzó a caer una tromba de agua que nos pilló debajo del árbol de la foto de hoy, y que esperábamos que nos protegiera.
No fue así; la violencia de la lluvia fue tal y durante tanto tiempo que nos empapamos.
Volvimos al hotel para quitarnos la ropa mojada.
A las siete de la tarde, casi de noche ya, no sabíamos muy bien qué hacer.
Volvimos al Zócalo y decidimos coger un autobús turístico para conseguir ver algo de la ciudad, dado que nos íbamos al día siguiente.
Había oscurecido y la visión que ofrecía el itinerario era limitada.
Primero fuimos por barrios gremiales y populares, luego subimos hasta puntos altos desde donde se divisaban panorámicas de la ciudad, que apenas se percibía más allá de las luces que se perdían al fondo.
Fue frustrante no haber realizado el itinerario de día porque nos habría permitido ver y fotografiar.
No obstante, aunque fuera de noche, mereció la pena. El recorrido duró en torno a una hora y cuarto, y las explicaciones turísticas fueron ajustadas e ilustrativas.
Volvimos al hotel a las diez. La temperatura había bajado considerablemente.
En marzo seguiré contando el itinerario, porque creo que es bueno dejar constancia de lo sucedido en un viaje, aunque solo sea por aplazar la desmemoria.
Dice Michel Onfray: De un viaje no deberían quedar más que tres o cuatro señales, cinco o seis a lo sumo. De hecho, tantas como los puntos cardinales necesarios para orientarse”.

"REALIDAD. La Actualidad en proceso de erosión". Rafael Argullol

Entre el abandono y la paradoja…y la recreación de un zoo…

Los peligros de la velocidad en negras motos locas…o la primavera que no floreció…

El mundo del Arte, los parques temáticos y el ensimismamiento de los equinos…

Mi última casa…donde probablemente moriré…

"La vida oscila, como un péndulo, entre el dolor y el hastío". Schopenhauer