Zinacantán: En la puerta de un taller de artesanía, una anciana con tres niñas nos propuso que las fotografiáramos.

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Fecha de diario
2019-10-19
Referencia
9692

DIGRESIÓN OCHO. Pájaros de verano. Colombia (2018). Guion: Maria Camila Arias, Jacques Toulemonde. Dirección: Ciro Guerra y Cristina Gallego. Intérpretes: Carmiña Martínez, José Acosta, Natalia Reyes, Jhon Narváez, Greider Meza, José Vicente Cote, Juan Bautista Martínez. Objetivamente, la película cuenta el inicio del narcotráfico, esa es la historia, admirablemente contada, rodada e interpretada pero, para mí, no solo es eso, sino, esencialmente, un tratado sobre la belleza, o más bien cómo concebir una historia, un escenario, unos personajes, y pasarlos por el tamiz alquímico de la cámara y el lenguaje cinematográfico. Vi la película en un estado de asombro y gozo desde el primer minuto al último. Era la primera obra que veía de estos realizadores, y me dejó en estado de shock estético. La acción, en cada uno de los escenarios, está milimétricamente planificada, moviendo la cámara y recorriendo la geografía de unos rostros serios e impenetrables, la del desierto, las costumbres ancestrales de los grupos sociales, sus valores y tradiciones (la etnia indígena Wayuu, sorprendente y profundamente racista) que les han mantenido unidos a lo largo de siglos. Todo un prodigio el baile de cortejo del comienzo, lleno de color y belleza, y la posterior negociación mediante dos -palabreros– que representan a cada una de las familias. Una de las tradiciones de gran valor para ellos es la de los palabreros: personajes especialmente dotados para la comunicación clara y la negociación. Son individuos experimentados, mayores, que conocen a la perfección la cultura y los códigos en la relaciones sociales de los clanes. Especialmente conmovedor el tratamiento y aproximación de la cámara a los rostros adustos y profundos de los personajes. En la textura de la piel y en la profundidad atávica de sus miradas está contenido el sentido esencial de su historia y de su cultura, las claves de sus valores y tradiciones. Aparte, los comportamientos prototípicos de las banderías del narcotráfico, tan sabidos ya, que los clanes de la zona instauran con naturalidad, como si no hubiera otros modos (no los hay) de tratar esos negocios pero en los que prevalece un fuerte sentido de la lealtad, especialmente al grupo y por encima de todo, a la familia. La película es un original y vibrante tratado de la naturaleza humana en esas latitudes, sedimentada desde tiempos inmemoriales, y también del paisaje, del desierto, de la luz. Apabullante belleza y sentido cinematográfico.

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Fecha de diario
2020-04-28
Referencia
9689

VIAJE A MÉXICO, Julio 2019
San Cristóbal de las Casas, San Lorenzo de Zinacantán:

sábado veinte, por la mañana

A media mañana cogimos el coche para acercarnos a dos Comunidades Tzotziles.
Primero, a San Lorenzo de Zinacantán, a doce kilómetros. Allí nos dirigimos a una casa familiar donde se tejían tapices, pañuelos, alfombras y todo tipo de prendas, con motivos tradicionales.
En la puerta, una anciana con tres niñas nos propuso que las fotografiáramos.
Lo hizo Naty a cambio de las únicas monedas que teníamos. Yo propuse fotografiar a cada una de ellas. Una señora de la casa nos cambió veinte pesos y fotografié a todas, a la señora y sus tres nietas.
Después, pasamos a una amplia habitación: una especie de sala de recepción donde estaba sentado el patriarca, apoyado en la pared; al otro lado, junto una ventana, otro hombre de mediana edad que debía ser su hijo, o tal vez un yerno. En las paredes de rasillones de cemento colgaban fotografías descoloridas.
El mobiliario consistía en un frigorífico, unas sillas de plástico y una televisión antigua apagada.
Pasamos a otra habitación algo más grande donde varias mujeres tejedoras trabajaban en sus telares pacientemente. En unas mesas exponían sus creaciones para eventuales compradores.
Bruno nos explicó el laborioso proceso. A nuestro lado, una mujer de mediana edad, de rodillas, tejía un paño en un telar de cintura: una especie de artilugio portátil, en el que iba pasando hilos horizontalmente por una trama vertical. Se llamaba de cintura porque la mujer sujetaba el pequeño telar con la cintura mediante una correa. El proceso se adivinaba desesperadamente lento: terminar un tapiz podía llevar meses.
En ningún momento pensamos en comprar nada.
De ahí pasamos a una tercera habitación de suelo de tierra prensada donde, en una plancha sobre brasas, cocinaban unas tortillas de maíz con las que luego envolvían un relleno, ya no recuerdo de qué. Nos contaron el proceso culinario y nos ofrecieron unas tortillas. Comimos una o dos cada uno. Les dimos la propina de rigor, agradecimos las atenciones y salimos…

© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Referencia
9690
© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Referencia
9694
© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Referencia
9691
© 2019 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2019
Localizacion
Zinacantán (México)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 400
Referencia
9693

“Ante una cámara siempre somos otro: el objetivo nos convierte en los diseñadores y gestores de nuestra propia apariencia”. Joan Fontcuberta

"Los niños –son los tiernos enigmas del mundo,/y en esos mismos enigmas se oculta la respuesta". Marina Tsvietáieva

"El rostro es el lugar donde la naturaleza, el cosmos entero, sale de su hermetismo". María Zambrano

Las gentes inauditas y yo, también inaudito…

"El ser supera el entendimiento, el ser da miedo". Emile Cioran

"Un sentimiento de inferioridad al ver los rostros sin nostalgia". Peter Handke