“Y que silencio de pronto. Un casi imperceptible/chapoteo/Es como una piedra tirada sobre las aguas mansas/de mi corazón”. José María Álvarez

© 2014 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2014
Localizacion
Pantano Valdecañas, (Cáceres, España)
Fecha de diario
2014-11-09
Referencia
7347

HISTORIAS DE UN HOMBRE SIN HISTORIA. La pesca, los peces muertos y los pájaros invisibles V:
De pronto, otro pez muerto, pero esta vez más entero y reblandecido por el agua. Me dispuse a fotografiar, claro. A diferencia de los pescadores de caña que los capturan vivos, yo, con mi máquina, que no es un artilugio de pescar, me tengo que conformar con los muertos. Cuando estaba tranquilamente componiendo: eligiendo distancia, proporciones, luces, y en fin esa interesada e interesante actividad que se deriva del hecho de fotografiar, que es casi como la de pescar, a lo lejos, divisé el ineludible todoterreno que siempre aparece y que supone que alguien viene a meter las narices en mis artísticos asuntos. Me tranquilicé diciéndome: -estás en un pantano y se supone que las orillas son públicas, como si fuera un río; en el camino no había ningún obstáculo ni prohibición, luego no pasará nada-. El vehículo hostil llegó donde me encontraba y comprobé que en las puertas había distintivos de la administración pública del territorio donde me encontraba (Extremadura). Se bajó un tipo de uniforme, como de guardabosques o algo parecido, y vino hacía mí portando un inquietante bloc. Me dije: -pepe, aunque no tenga sentido vas a tener problemas-. Mi máquina de fotografiar (o pescar) peces muertos estaba en la orilla sobre el trípode.
El guardabosques: -buenas tardes, qué hace aquí?
El fotógrafo de peces muertos: -Nada, fotografío el paisaje-
El guardabosques: -Enséñeme el permiso-
El fotógrafo de peces muertos: -No, yo de eso no tengo-
El guardabosques: -Entonces no puede estar aquí. Tiene que marcharse ahora mismo o le tendré que multar (entendí lo del cuaderno).
El fotógrafo de peces muertos: -Por qué, he llegado hasta aquí sin ningún aviso o prohibición, estoy en la orilla del pantano y solo fotografío el paisaje, le dije con expresión inocente señalando mi máquina de fotografiar paisajes. Naturalmente, no le dije lo del pez muerto, por si se enfadaba.
El guardabosques: -Está en terreno Zepa, de acceso prohibido o restringido. Solo se puede entrar con permiso que tiene que solicitar en Mérida-
El fotógrafo de peces muertos (con gesto de perplejidad): –¿Y eso de la Zepa qué es?
El guardabosques (mirándome como si fuera subnormal)-Zona de especial protección para aves.La información está en Internet- me dijo con suficiencia, como si ya tuviera claro que yo era un pobre ignorante.
El fotógrafo de peces muertos: -Pues desde que llevo aquí, pájaros no he visto- Sentí que se tensaba y en su gesto algo así como: te la vas a cargar, tío.
A continuación me pidió el DNI, aclarándome que no era para multarme (todavía) sino para verificar que no tenía antecedentes de agresiones ecológicas (o a los pájaros, supuse). Me pregunté: se lo doy o no a este fatuo palurdo con uniforme de guardabosques. Como solo quería que me dejara en paz lo antes posible se lo di (de muy mala gana). Apuntó mis datos cuidadosamente. Debió pensar que me tenía acorralado y se envalentonó pidiéndome que le enseñara el maletero por si llevaba una escopeta de caza, -me dijo-.
Se está pasando mucho El guardabosques -pensé- pero como tampoco deseaba que llamara a la guardia civil (esos van armados) para reducirme o algo peor, y como no tenía nada que ocultar lo abrí. Ni siquiera miró. Supuse que quería dejar claro quién mandaba allí.
Me atreví a decirle que deberían poner indicadores informativos con las restricciones de lo de la Zepa (protección de pajaritos, que no de inocuos fotógrafos de trípode, que ya me gustaría, algo así como una cierta conciencia de que hay que respetarnos y cuidarnos y no perseguirnos con saña, porque nosotros sí que somos una especie en extinción). El guardabosques me dijo que ya estaba en Internet y que era suficiente. El tipo, como además de partidario de los nuevos soportes de comunicación también parecía convencido de un cierto determinismo fatal y escéptico, me matizó que para qué, si los destruían. No me adentré en esa dialéctica, para qué. Finalmente se fue advirtiéndome que la próxima vez, antes de entrar en un territorio Zepa, tenía que pedir permiso en Mérida, aunque también podía hacerlo a través de Internet (no me lo creí). Me largué contrariado por mi prudente docilidad en el trato con el severo guardabosques. Y así, medio enfadado, conduje hasta mi casa.    

© 2014 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2014
Localizacion
Pantano Valdecañas, (Cáceres, España)
Fecha de diario
2014-11-07
Referencia
7348

HISTORIAS DE UN HOMBRE SIN HISTORIA. La pesca, los peces muertos y los pájaros invisibles III:
Me largué de esa orilla del pantano y me acerqué a Bohonal de Ibor, a tomar una cerveza. Descansé un rato. El sitio que elegí fue un hotel, restaurante y bar a las afueras. La chica que me sirvió era guapa y simpática, lo que contribuyó a que mi estado de ánimo subiera unos centímetros sobre el suelo. Siempre es un estupendo acontecimiento encontrarte frente a una mujer atractiva que además se dirige a ti sonriente con interés en saber lo que te apetece, lo que puede provocar, incluso, animadas fantasías. Conforta el ánimo y da sentido al momento. Más tarde, continué con lo mío (la pesca activa): seguí bordeando el embalse hacía el este por carretera. Unos kilómetros más adelante, con el pantano a la izquierda según avanzaba, observé que salía un camino en dirección a la orilla. No había ni señales ni indicadores y tampoco prohibiciones, así que me dije: -perfecto, pasaré un buen rato dando una vuelta por la orilla (baja y plana), mirando el agua y atento por si pesco algo que merezca la pena mirar o fotografiar-. Cuando no me duele ni me preocupa nada, el sol brilla, la temperatura y la luz son perfectas, la hora es la que tiene que ser, y encima estoy receptivo, cualquier cosita de nada puede excitarme y darme ganas de hacer, lo que sea que me haga sentirme vivo y en conformidad con el mundo. Como dice Miguel de Unamuno en El perfecto pescador de caña, ese ensayo tan espiritual y contemplativo: «El agua, pues, purifica al alma; al alma del hombre y al de la naturaleza. El agua da vida al paisaje. -No hay paisaje feo con agua-, me dijo una dama.»

© 2014 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2014
Localizacion
Talaverilla, (Cáceres, España)
Tamaño
18 x 22,7 cm
Referencia
7317
© 2000 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2000
Localizacion
Huelva (España)
Soporte de copias
ILFOBROM GALERY FB
Viraje
SELENIO
Tamaño
46,5 x 58,2 cm
Copiado máximo en soporte baritado
2
Copias disponibles
2
Año de copiado
2001
Fecha de diario
2007-04-07
Referencia
195

Poema en viñetas. Dino Buzzati. Es uno de mis amados escritores. No sabía que además dibujara y que lo hiciera tan magníficamente. La historia que cuenta es misteriosa, literaria y  plásticamente. Recreación del mito de Orfeo con sentido del humor: Orfeo es  Orfi; Eurídice es Eura y él no toca la lira,  sino la guitarra. Eura entra en el territorio de la muerte y queda cautiva en el submundo impenetrable para los vivos; excepto  para Orfi que encanta al guardián del averno y permite que libere a la cautiva del territorio onírico de la muerte. Orfi vuelve sólo, el mito de Orfeo vuelve a suceder con todo su fatalismo «y en el desierto de Kalahari las nubes torreadas de la eternidad pasaban lentamente».

© 2016 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2016
Localizacion
Argés (España)
Fecha de diario
2016-11-08
Referencia
4429

LA VIDA INMEDIATA VIII. Jueves, tres de noviembre. Hoy, a las nueve, he ido a pasear al pantano de Argés con mi perrito. De siete a nueve he seguido peleándome con la línea de fibra óptica porque ayer por la tarde no me compré el loro que me prometí (iré esta tarde). En los paseos oigo, entre otros podcast, El ojo crítico, con mucho gusto y placer. Han entrevistado a Piedad Bonett, escritora colombiana, con motivo de la edición de una antología de su obra poética. Mujer encantadora y sensible.  Contaba que, cuando inició la preparación, pensó en hacer una selección pero luego desistió porque le resultada doloroso dado que todos los poemas tenían algún sentido para ella, aunque no fueran perfectos. Además, razonaba, que lo que ella podía considerar que no tuviera el nivel suficiente, a algún lector podría encantarle. Dicho así, no habría que descartar nada, sobre todo pensando en los destinatarios. Sin embargo, yo, ahora que me encuentro inmerso en una poda masiva, no tengo el problema de Bonett, a pesar de que me acompañen dudas a la hora de pulsar la tecla de suprimir, sencillamente porque Bonett piensa que tiene lectores pero yo no dispongo de nada parecido. Luego da absolutamente igual lo que haga, suprimir o mantener.     

© 1987 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
1987
Localizacion
Toledo (España)
Soporte de copias
ILFOBROM GALERY FB
Viraje
SELENIO
Tamaño
20 x 25 cm
Copiado máximo en soporte baritado
4
Copias disponibles
1
Año de copiado
2004
Referencia
1682

"...y los tajos por donde corrió durante siglos y siglos la sangría de los ejércitos de todos lo ideales y de todas las ambiciones". Gregorio Marañon

"...alado oleaje bronco, y las leyendas graves de su furia…". Felipe Benítez Reyes

“El realismo no me atrae, y no sé muy bien qué es la verdad, puesto que cambia constantemente”. Mark Strand

"¡Oh suave Tajo ancestral y mudo,/pequeña verdad donde el cielo se refleja!" Fernando Pessoa

...allí estaban unas precarios y breves restos de lo que fue un pueblo de origen romano…

“...delgadez de la línea que engendra un horizonte o el deseo sin fin de lo lejano”. José Ángel Valente