"...La evasión no concede/libertad. Sólo tiene/libertad quien la gana". Antonio Gamoneda
DIGRESIÓN CINCO. The Irishman (El Irlandés). EE.UU. (2019). Guion: Steven Zaillian (Libro: Charles Brandt). Dirección: Martin Scorsese. Intérpretes: Robert de Niro, Al Pacino, Joe Pesci, Stephen Graham, Harvey Keitel, Bobby Cannavale, Anna Paquin, Ray Romano, Katherine Narducci, Jesse Plemons, Jack Huston, Domenick Lombardozzi.
Para mí esta impoluta, sólida y larga película es el resultado de tanta y tanta experiencia acumulada por parte de todos los participantes en el proyecto. Sobre todo, también, un tratado sobre el paso del tiempo, la decadencia y el fatal destino de personajes abocados a la tragedia. Además, trata de otras muchas cosas, como la amistad, la lealtad, la dignidad, el orgullo, la política, la corrupción, el poder y una cierta cultura de EE.UU, tan apasionante, fascinante y peligrosa. Mis nietas son estadounidenses y me encanta que lo sean porque es un país tan grande e inmenso, en todos los aspectos, que vivirán en el centro mismo del mundo nuevo, en un lugar donde las potencialidades de crecimiento personal son complejas, diversas e inagotables. Digresiones aparte, la historia está concebida a partir de hechos y personajes reales de un modo ortodoxamente irreprochable con elipsis que permiten profundizar en las biografías de cada uno de los complicados protagonistas. No obstante, apenas si conseguí llegar a concretar una impresión y mucho menos una valoración sobre los aspectos objetivos y sobre la vida de los personajes, sus motivaciones, fatales estrategias, hechos históricos y sociopolíticos de tres décadas (de los sesenta a los noventa), porque su aparatosa monumentalidad me dificultó una mirada más precisa, tranquila, atenta y, sobre todo, analítica. Lo que sí colmó completamente mis expectativas, hasta el asombro, fue admirar el brillantísimo resultado al plasmar el paso del tiempo a través de los rostros y cuerpos de Pesci y de Niro (a pesar, o precisamente por eso, de los tratamientos digitales). Los tres protagonistas (especialmente brillante Al Pacino) ofrecen, más allá de las implicaciones históricas, todo un tratado de la excelencia interpretativa: elevan su trabajo a la condición de tesis filosófica sobre el decaimiento y el ineludible ocaso. Historia crepuscular que se acerca a los misterios que mueven los resortes de la amistad, la lealtad y el amor entre seres humanos. También, sobre lo contrario.
Hoy se acaba el año. Mañana, dos mil diez ya, me gustaría reír infinitamente más que en dos mil nueve. «¡Cuantas cosas son posibles aún! ¡Aprended pues a reíros de vosotros sin preocuparos de vosotros!» F. Nietzsche. Para empezar, esta noche me gustaría pasarla de fiesta estruendosa; y mañana no hacer absolutamente nada. «Y, después de todo, ¿Qué sentido tenían los poemas? La capacidad para follarse a una mujer preciosa era el Arte más grande del Hombre. Todo lo demás era papel de estaño. La inmortalidad era la capacidad para follar hasta morirse…» Charles Bukowski
