El arte de las tristes interpretaciones…

© 2009 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2009
Localizacion
Edimburgo (Escocia)
Copiado máximo en soporte baritado
3
Fecha de diario
2009-10-13
Referencia
3917

«El verdadero significado de las cosas se encuentra al decir las mismas cosas con otras palabras». Charles Chaplin. Tenía dos fotografías y dos citas de Chaplin, las de ayer y las de hoy, y se acabó. No tengo más. Ah, y hoy no escribiré ni una sola palabra más.

© 2009 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2009
Localizacion
Edimburgo (Escocia)
Copiado máximo en soporte baritado
3
Fecha de diario
2009-10-12
Referencia
3918

Domingo: octubre. Constantes vitales: las mismas que el día cinco, o seis, o siete…en fin, como siga así no sé en que lamentables condiciones llegaré a final de mes. Supongo que exhausto. Hoy he querido mostrar una fotografía muy bonita de un niño con Charles Chaplin, que siempre me ha parecido un individuo dominguero y otoñal. La fotografía la realicé un domingo de Agosto, por la tarde. Debería ser una fotografía veraniega pero no, es otoñal, porque está realizada en Edimburgo, y allí el verano es otoño. Como el texto se me quedaba corto; he buscado una cita de Chaplin en Internet (es un recurso fácil), porque de él nunca he leído nada. No me gusta hacer las cosas facilonas, pero qué le voy hacer, si llevo todo el mes empujando esforzadamente. Al menos la cita está muy bien: Perder con clase y vencer con osadía, porque el mundo pertenece a quienes se atreven. Charles Chaplin

© 2009 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2009
Localizacion
Edimburgo (Escocia)
Soporte de imagen
-120 MM- ROLLEI SUPERPAN 200(400)
Copiado máximo en soporte baritado
3
Fecha de diario
2019-11-18
Referencia
3832

DIGRESIÓN SIETE. ¿Quién es el Señor Schmitt?, de Sebastién Thiéry. Versión y dirección: Sergio Peris-Mencheta. Intérpretes: Javier Gutiérrez, Cristina Castaño, Xabi Murua, Quique Fernández, Armando Buika. Teatro Español, Madrid, diecinueve de Octubre. No lo supimos; podía ser el Señor Carnero, o tal vez el Señor Schmitt, o ninguno de los dos, o los dos. Ese era el planteamiento. La pérdida de identidad, o tal vez de la memoria, puede ser angustioso (desorientación, confusión, ofuscación, desesperación). Sin embargo, en esta risueña y desenfadada obra, toda esa catarsis existencial se desarrolla con risa, con desahogado humor que te mantiene encantado todo el rato. Sí, fue una obra humorística y eso siempre es de agradecer, indudablemente. Hacía muchísimo tiempo que no me reía tanto en el teatro (y en ninguna parte) y el señor Schmitt, o el señor Carnero, y su señora, consiguieron que nos riéramos todos de muy buena gana, con gusto. Dice el programa de mano: “Sebastien Thiéry tiene la capacidad de escribir una obra meramente existencialista”, y sí, puede que contenga esos matices, pero en clave de humor. Yo, que tengo también la manía existencialista, pero muy seria y aburrida, reconocí esos trazos sobre todo en la hilarante intervención de un psicoanalista: “desarrolle… desarrolle…” decía a su confuso paciente, cuando apenas había nada que desarrollar. Esa es la técnica del psicoanálisis: hacernos creer que hay algo digno de atención (y desarrollo) en el más desolador e insustancial vacío que todos llevamos dentro. La ilusión de la singularidad en lo que tan solo es un tedioso lugar común. Una vez entendido esto, que no asumido, uno llega a la conclusión de que quizá lo único que merezca la pena sea reír y reír. No sé. El caso es que esta obra, de autor para mi completamente desconocido, consiguió que lo pasáramos realmente bien durante hora y media, y lo hizo elegante, sutil y graciosamente. Cuestiones existencialmente serias aparte. La piedra angular sobre la que pivota la obra es la eficacísima fórmula de que -nada es lo que parece-, planteamiento difícil de manejar inteligentemente (eludiendo lo obvio), y Thiéry lo hace brillantemente. La puesta en escena se desarrolla en un tempo perfecto y con una escenografía apropiada, aunque no especialmente brillante. Los actores, espléndidos. Teatro lleno y ovación de gala para todos. Fuera, cuando salimos, el diluvio. Cruzamos la plaza de Santa Ana y cenamos en un restaurante de amplios ventanales mientras llovía. A veces, la vida amable se presenta y solo queda disfrutarla. Claro que sí.

© 2008 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2008
Localizacion
Florencia (Italia)
Soporte de imagen
-35 MM. Kodak. High-Speed Infrared 400
Copiado máximo en soporte baritado
2
Fecha de diario
2008-11-09
Referencia
3289

Nos gustan las noches porque son perfectas para establecer relaciones breves, fugaces, descomprometidas. Todo se reduce a diálogos cortos con espacio para la ocurrencia, el juego, la risa y se acabó. Antes de darte cuenta todo ha terminado y sin empezar nada todo es olvido. Perfecto. La fugacidad de unos minutos frívolos son ideales para equilibrar la pesada e inevitable cuenta de las relaciones sociales. Puesto que tenemos que tratar con nuestros semejantes (sobre esto último habría mucho que hablar), si no queremos que los silencios nos enloquezcan, hagámoslo levemente, y que dure poco, lo menos posible, para así poder dedicarnos a lo que verdaderamente importa…

© 2008 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2008
Localizacion
Florencia (Italia)
Soporte de imagen
-35 MM. Kodak. High-Speed Infrared 400
Copiado máximo en soporte baritado
2
Fecha de diario
2008-11-08
Referencia
3288

Con los compañeros de viaje qué pasaba? Nada de lo que me pueda acordar. Ya se sabe que en un barco hay espacios comunes estrechos y limitados, y si en estos viven varios cientos de personas, aunque sea por poco tiempo, la independencia despreocupada es terriblemente complicada. Además, cuando el artefacto flotante se pone en movimiento, no hay escapatoria. No obstante, contamos con experiencia y algunas habilidades para  hacer que ciertos contratiempos sociales sean lo menos penosos posibles. Siempre hay que procurar moverse en dirección contraria: ellos van, nosotros venimos, que casualidad, y viceversa. Otra técnica consiste en tener siempre algo que hacer u otro lugar donde ir, inaplazablemente. Cuando ya no hay posibilidad de huida y coincides en el mismo sitio y además quieres seguir allí durante las dos próximas horas (y los demás también), hay que ensimismarse con una ligera sonrisa de complacencia, pero mostrando una actitud distante, absorta e indiferente, como dando a entender que establecer una conversación contigo va a suponer un ímprobo esfuerzo y probablemente no conseguirán estar a la altura del alto nivel intelectual que se adivina en tus gestos de hombre «interesante» y de carácter exigente.

© 2011 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2011
Localizacion
Lisboa (Portugal)
Soporte de imagen
-120 MM- NEOPAN 400 (1600)
Copiado máximo en soporte baritado
2
Fecha de diario
2011-09-12
Referencia
4922

…Cómo decía ayer, no tengo ni idea de cómo apareció, en mi consciencia de un martes cualquiera, por la mañana, la palabra «friki», pero, una vez que se hizo visible, me pregunté ¿qué es un «friki»? (siempre he supuesto que yo no era un «friki» en absoluto porque en mi ignorancia lo asociaba a -hortera- y no creo serlo…) Inmediatamente, comencé a deambular por informaciones y escritos en la red sobre lo «friki«, y, oh sorpresa, resulta que muy probablemente lo sea. «Wikipedia sostiene que un «friki» es un tipo raro, de comportamiento o apariencia inusual, que vive obsesionado por asuntos como la ciencia-ficción, los videojuegos, los cómics o la informática, y que a menudo persigue llamar la atención con indumentarias y comportamientos anómalos; asimismo sostiene que, a causa de su extravagancia y sus gustos, la gente de provecho considera al «friki» un tipo inmaduro, si no infantil». Javier Cercas. Aunque a mí apenas me interesan las aficiones enumeradas por Cercas o Wikipedia, lo de mi cámara y este diario son síntomas más que sospechosos. Sigo mañana…

"El camino que lleva al prójimo es demasiado largo para mí". Franz Kafka

Las elecciones comprometidas…

Buscar la aproximación al cuerpo como enigma, sin intervención de la palabra…

"MATRIMONIO. Estado o situación de una comunidad integrada por un amo, una ama y dos esclavos, que suman en total dos personas". Ambrose Bierce

Las gentes salieron a la calle en primavera, a ver qué pasaba…

Primero fue el ciclista, luego el actor y después los demás…