...allí estaban unas precarios y breves restos de lo que fue un pueblo de origen romano…
…El catorce de julio de este año, en este diario, conté que el diez de junio hice un viaje para ver un pueblo sumergido en un embalse que creía que resurgiría de las aguas en honor a mi sola presencia. Pero no, como era lógico, no fue así (nadie emerge de nada por mi dudosa y prescindible presencia). Unos comprensivos aunque inoportunos vaqueros me dijeron que hasta finales de agosto o septiembre no sucedería. Así que he esperado tranquilo hasta el otro día que me fui hasta allí, a ver si la milagrosa predicción se había cumplido, y sí, allí estaban unas precarios y breves restos de lo que fue un pueblo de origen romano…
…Me entusiasmó el lugar porque no era nada y mucho: solo formas informes, impremeditadas, que se componían con un incierto y sugestivo equilibrio. Los restos más evidentes no levantaban más allá de medio metro del suelo y era imposible adivinar a que podrían haber correspondido. Había piedras de granito que parecían de la primitiva ciudad, pero eso daba igual, mi interés y conocimientos arqueológicos son leves y modestos. Sin embargo, me interesa y mucho, las formas que toma el tiempo y el azar para expresarse. Eso es muy importante en mi vida. Puedo pasarme horas embelesado, acariciando espiritual y fotográficamente (una de mis maneras de acariciar) lugares perdidos donde el tiempo se ha expresado, se ha hecho presente y ha creado formas sugestivas e inexplicables. Y yo, también producto del mismo e inaprensible fenómeno, solo puedo entregarme apasionadamente a declinar formas y formas y ser feliz haciéndolo…
…Pasé hora y media yendo y viniendo entre la inmensa extensión de piedras de río, grandes, que debieron formar parte de las construcciones de la ciudad y de la orilla del agua del embalse, que antes solo fue río (Tajo). Las formas que adoptaban en el visor de la cámara me hicieron casi perder la noción del tiempo, su artífice, hasta que llegó la lluvia, elemento no invitado a la fiesta que se hizo presente a lo largo de todo el día, de vez en cuando, y que hizo que tuviera que abandonar e irme rápidamente…