10 JULIO 2023

© 2023 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2023
Localizacion
Película: Tony Manero (2008), de Pablo Larraín
Soporte de imagen
-DIGITAL 25.600
Fecha de diario
2023-07-10
Referencia
10039

DIARIO DE ENVEJECIMIENTO
(prólogo a un cuentecito de varios días, con tres capítulos posibles)
Domingo, nueve de julio de dos mil 

Y aún nada ni nadie ha podido convencerle de que envejecer tiene su gracia. ¿Y la tiene? Enrique Vila Matas
No lo sé (a lo mejor sí, o no).
Hoy he visto una foto de Clint Eastwood (93 años) en prensa, a propósito del asombro que produce que a su edad siga dirigiendo cine (al parecer, ahora, lo está haciendo). A mí también me asombra. Sin embargo, en esa fotografía aparece un hombre muy delgado caminando y doblado por la cintura, como si se fuera a romper en cualquier momento. A mí, para llegar a esa fotografía me quedan en torno a 25 años (nadie sabe que llegaré, pero yo sí).
Me resisto a encontrar la gracia al envejecer. Pero una cosa parece clara: si mi deterioro me lo tomo en serio voy a sufrir infinitamente más (25 años de sufrimiento serían demasiados y estropearía gran parte de mi vida, casi un cuarto, los otros tres ya los traigo estropeados).
Conclusión: o me tomo a broma este triste asunto, o mejor largarme de este mundo de la forma más indolora que sea capaz de encontrar (odio el dolor, como todo el mundo).
Lo curioso de este prólogo es que se me ha ocurrido incorporarlo cuando ya tengo cinco días escritos y concebidos fotográficamente, y no son nada graciosos. Tampoco los voy a eliminar o reescribir. Así que para adelante con todo.
Mucho me temo que los doce que escribiré más adelante, serán igual de sombríos porque, no nos engañemos, la vejez es una jodida cosa. Quizá lo compense con un epílogo gracioso.
Cuál sería una de las claves para mejorar mi estado de ánimo (mi cuerpo funciona bastante bien): Follar. No, queridos, no es una frivolidad, es la puñetera verdad. Cuando el deseo corre como savia fluida por las venas y afecta favorablemente a todos los sentidos, especialmente al gusto, al tacto y a la vista porque todo cambia de color, no habrá ni pena, ni sombras, ni tristeza.
El sexo es un momento extraordinario, en donde el presente es lo único que existe, y se acaba el dolor”. Santiago Gamboa
Claro, si todo es presente dichoso, a quién le interesa el quejumbroso y anciano futuro.
Para los viejos el campo existencial natural y deseable sería el deseo y el sexo; sí, porque una vez que hemos superado las fases molestas del amor ¿a quién de más de sesenta años, por ejemplo, puede interesarle ese inconveniente construido con los materiales de las dependencias y las debilidades? A nadie, coño, a nadie. A vivir y a follar, si puedes, y lo demás, tonterías.
Las claves y estrategias para combatir la vejez y las tristes sensaciones que la acompañan, serían: el bien relativizar, el buen comer y beber, el bien dormir, el buen sexo (si es malo no merece la pena), el bien reír… Ah, y una cosa muy importante, mantener alejados a los tontos: como tengas a un tonto cerca que además tenga libre acceso a tu vida, un cuñado, por ejemplo ¡¡¡estás jodido!!! Diría más, a las alturas de la vejez, la máxima calidad de vida estriba en la soledad, la libertad y un suficiente acceso a bienes placenteros.
En resumen, una vez superadas las épocas de la trascendencia y de los proyectos (que ya no puede haber), y del amor, que tampoco: ¡¡¡viva el hedonismo voraz, descomprometido y lúcido!!!
En cuanto al amor y el sexo (virtuosa combinación válida para otras edades), a la vejez (viruelas), mejor solo sexo. Ahora, cuando veo una atractiva mujer por la calle ya no pienso como antes: me gustaría enamorarme de esa mujer; no ahora tan solo me sale: deseo a esa mujer…
El sexo es el lugar en donde toda pedantería queda desenmascarada y ridiculizada y exterminada. El sexo es la materialización de la salud, el espejo de la salud”. Manuel Vilas
La Fotografía: De la película: Tony Manero (2008), de Pablo Larrainzar. Oscura y convulsa..

Pepe Fuentes ·