15 AGOSTO 2023

© 2021 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2021
Localizacion
Madrid (España)
Soporte de imagen
-DIGITAL 12.800
Fecha de diario
2023-08-15
Referencia
3060

LOS DÍAS 54
Viernes, once de Agosto de 2023

… Ayer fue el día del glorioso, aunque sombrío, descubrimiento de la era septuagenaria de mi vida. Llegué al borde de las simas penumbrosas que se abrían vertiginosamente frente a mí, con la bandera negra de la decadencia (mi única patria) en una mano, y una espada oxidada en la otra, como si fuera Vasco Núñez de Balboa frente al Océano Pacífico, pero sin gloria.
Lo único que sé de esta inclemente era que acabo de descubrir es que viviré en ella siempre porque será el último espaciotemporal que habitaré. No me gusta la perspectiva. En absoluto me gusta. No encuentro en ella nada que movilice ni una sola fibra positiva o vitalista en mi ser. Mataría a quien me diga lo contrario porque me tomo muy a mal que se burlen de mí. Ya me encargaré yo solito de lidiar con el toro zaino y siniestro de la edad, que derrota por los dos lados. Y no solo a las cinco de la tarde (García Lorca e Ignacio Sánchez Mejías: el poeta y el torero muerto), sino a cualquier hora del día y de la noche. Incesante e incansablemente.
Para todos y fueron quince personas las que me buscaron y me encontraron (tenían mi número de móvil) utilizaron una palabra clave al saludarme: ¡¡¡felicidades!!! Eso me dijeron todos. Y yo asentí consideradamente. No me enfadé con nadie, primero porque son mis personas queridas, o, dicho de otro modo, son las que previsiblemente asistirán a mi entierro, ellas y no otras, por lo que es imposible que dude de su buena intención; aunque, todos somos conscientes de la pantomima que representamos. No importa: ¡que la vida siga!
Asumo, algo contrariado, que nada se puede hacer (ellos y la humanidad entera nada pueden hacer para parar el tiempo). Yo tampoco.
Pasé todo el día en mi casa, escribiendo y contestando llamadas. A las nueve y cuarto salí a cenar con mi amigo Ángel, en una terraza. Estuvimos juntos hasta las doce y media. Interesante conversación para nosotros, somos tan amigos y desde hace tiempo que todo nos sale muy bien.
Hoy, el día después del momentazo del encuentro con una nueva era en mi vida, el tiempo y los hechos transcurren lenta y tranquilamente porque no voy a necesitar, en principio, tratamientos o convalecencias específicas o especiales. El proceso que se inicia hoy sé cómo será y como avanzará en el tiempo (casi seguro que lo sé), pero lo que no sé es cuánto durará.
La Fotografía: Pteranodon, réptil volador de una envergadura de más de 7 m. Su existencia se remonta al periodo Cretácico Superior, hace entre 60 y 100 millones de años. Más o menos como yo que ahora también soy una especie de la era de los dinosaurios, que no vuelo todavía, pero ya volaré.

Pepe Fuentes ·