3 MARZO 2024

© 2021 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2021
Localizacion
Argés (Toledo)
Soporte de imagen
DIGITAL 400
Fecha de diario
2024-03-03
Referencia
6282

COLECCIÓN DE MISCELÁNEAS 40
“En un mundo sin Dios, el sentido del humor es casi una obligación moral”. Kafka
Viernes, uno de marzo de dos mil veinticuatro

Sin darme cuenta he saltado a otro mes, Marzo, y dentro de doce días hará veinte años que estoy escribiendo este diario (día 13, el aniversario).
Ayer, mes pasado, nada pasó.
A ver, lo cuento, como demostración palpable de que la vela se consume, irremediablemente.
Nada me gustaría más que relatar aquí una actividad frenética, o tranquila, pero emocionante, vibrante, plena de tensión. Pero no.
Por la mañana, paseo, oyendo una novela de acción de Juan Gómez-Jurado, Todo arde, primera entrega. Este autor lo es de sagas, al parecer (antes había oído las dos primera de Reina roja). En esta el autor es capaz de introducirte en una historia incesante que no da respiro y convertir sus personajes en “personajazos” (en esta obra hay hasta varios legionarios en paro forzoso),  con los que conectas y empatizas enseguida. Me uní a ellos en espíritu, claro, por ser perdedores irredentos, en unas acciones imposibles encantado de hacerlo. Son y somos los buenos, las mejores personas posibles y cuidado con nosotros, ganadores,  porque vamos a por vosotros; me digo encantado de la vida ante la promesa de una segura y trepidante aventura.
Este creador de vidas imposibles (él es un ganador), propone acciones peligrosas y tensión, mucha, en la que la justicia y la verdad resplandecerá.
Para mí es una experiencia perfecta ya que vivo en estado letárgico y ruinoso vivencialmente, porque, como dice la protagonista de la novela, citando a Temístocles: “La ruina nos defiende de una ruina mayor”.
Una de las razones del abrumador éxito de este hombre prolífico e imaginativo, que sale al rescate de todos los muermos del mundo, al menos mientras dura la dura vida de sus protagonistas porque no te queda tiempo para la autopercepción lastimosa. Al menos compartes desasosiegos, fracasos y éxitos.
La magia de la literatura, en tantos casos, es hacernos creer a los perdedores que también podemos vivir desde los márgenes y convertir nuestra vida en rutilantes experiencias vitales. Ejemplos, muchos, y el principal en la historia, Don Quijote de la Mancha, o, se me viene ahora a la memoria en flash urgente, Ignatius Reilley, de La conjura de los necios, y muchos, muchos más. Pero, cuidado, las condiciones esenciales son que esos relatos sean inteligentes y rebosen sentido del humor, porque si no, no; no funcionan.
Esas habilidades geniales las tiene Gómez-Jurado, y la prueba es que un tipo tan adusto y aburrido como yo, oyendo sus novelas por los caminos solitarios en íntima sintonía con la acción que desarrolla (yo soy de la partida de los buenos), a veces sonrío o me río a carcajadas, también.
Ayer, por ejemplo, comimos con cuatro “lejías” retirados y planeamos un golpe maestro. Ya veremos como salen las cosas. Ahora, dentro de un rato, saldremos Mi Charlie y yo, a caminar por un camino abandonado, al sol; él a intentar pillar algún conejo, que nunca consigue (él también es un perdedor); y yo a dar el golpe maestro con mis colegas de la novela. Y a ser posible, a reír a la menor oportunidad que me ofrezca Gómez-Jurado. Hay que reír mientras se siga con vida, luego es más difícil”. Juan Gómez-Jurado
La Fotografía: Pues eso, uno de mis caminos habituales donde nunca hay nadie, ni a la ida ni a la vuelta.

Pepe Fuentes ·